En estos momentos de fuerte inquietud y desestabilización, nos parece que puede ser de ayuda tomarnos unos minutos al día para meditar o practicar tècnicas de mindfulness, y así conectarnos con nuestro interior, para liberarnos de las tensiones, de los sentimientos negativos como la ansiedad, el miedo, el estrés, la depresión y entrar en un estado de calma y de paz interior que nos permita conectar con nuestra energía.
Nuestras meditaciones están dirigidas a todas aquellas personas que quieran iniciarse en la meditación o que ya meditan y quieren tener un ámbito compartido para intercambiar sobre sus experiencias y avanzar juntos en este camino.
Trabajamos con técnicas sencillas de relajación y atención que nos permiten adentrarnos en nuestro mundo interno. Realizamos una práctica conjunta cada semana que nos ayuda a relajar el cuerpo, tranquilizar el corazón y aquietar la mente.
Meditar en Barcelona somos un colectivo, sin ánimo de lucro, que realizamos prácticas semanales de trabajos de desarrollo personal y meditación. Desde nuestra comunidad y de manera voluntaria, ofrecemos diversos talleres para aprender a meditar. Se trata de talleres gratuitos, o con pequeña aportación voluntaria para cubrir los gastos de las instalaciones.
Para nosotros, trabajar en grupo sin ningún tipo de mercantilismo es importante por que consideramos que ayuda a crear comunidad, a reforzar el tejido social cada dias más desintegrado tras éstas décadas digitales de impronta neoliberal.
Nuestras sesiones de meditación en Barcelona se fundamentan en procedimientos desarrollados por la corriente del Nuevo Humanismo iniciada por el pensador Silo. El origen de estas prácticas se remonta a épocas muy antiguas de diferentes tradiciones espirituales, que contaban con técnicas capaces de llevar a las personas a estados de mayor lucidez e inspiración.
Trabajamos técnicas de relajación, tecnicas atencionales y de auto observación, realizamos prácticas de conciencia de sí o atención plena (tambien conocido como mindfulness) y trabajos de visualizaciones y meditaciones guiadas (similares al yoga nidra), que tanto interés están suscitando en el campo de la psicología.
También trabajamos técnicas de respiración, para aprender a mejorar nuestra energia vital y psicofisica.
También realizamos retiros para ayudar a desconectar de las tensiones cotidianas, experimentar la quietud, la respiración consciente, la atención al esquema corporal, el silenciamiento de la actividad mental, la auto observación de los circuitos emocionales, y la atención plena.
Nuestro objetivo es ofrecer herramientas, desde una mirada humanista, para que la práctica de la meditación resulte fácil, ayude a desconectarte de la presión y el estrés que genera el estilo de vida actual, y puedas reconectarte contigo misme desde un plano más existencial y vital.
Los talleres los realizamos en grupo, de este modo reforzamos mejor la pràctica personal. Mantenemos encuentros regulares, a ser posibles semanales. Trabajamos con enfoques sencillos y prácticos, comprensible para todos.
Tomando como referencia propuestas y experiencias de la Filosofia del Nuevo Humanismo de las últimas décadas, vamos estudiando de manera práctica el funcionamiento del psiquismo, transformación de las imágenes mentales, la relajación de las tensiones corporales físicas internas y externas.
Damos gran importancia al intercambio mediante tertulias de las experiencias y registros personales que van apareciendo entre los miembros del grupo a medida que vamos avanzando en las prácticas.
La meditación se hace más intensa el silencio profundo cuando la realizamos en grupo.
Compartiendo experiencia y conocimientos con los compañeros de los grupos de trabajo, podrás adquirir herramientas efectivas para combatir la intraquilidad cotidiana que reina el mundo, y que tanto nos está afectando, podrás gestionar tus circuitos emocionales, desde un nivel de conciencia más despierto y podrás, poco a poco, aprender a auto observarte en las actividades de tu vida cotidiana.
Realizando tan sólo unos minutos diarios de meditación, podrás aprender a gestionar el estrés, a no quedarte tan atrapado en las tensiones cotidianas, a tener mayor control emocional y a mejorar en entusiasmo y energía.
Comenzarás a mirar hacia tu interior, hacia tu propio paisaje interno, mientras silencias tu mente, y notarás la quietud que se va generando en tu cuerpo, tu mente y tu corazón, sentiras mayor libertad y podrás disfrutar en tu vida cotidiana de una sensación de mejora y estabilidad emocional, de mayor salud en general, equilibrio y alegría.
Aprender a relajar la mente, con diferentes técnicas de meditación mindfulness, te ayudará a mejorar la relación con la pareja, con la familia, amigos...etc., te será más fácil mantener una actitud positiva ante las cosas, y adquir poco a poco más energía, mayor capacidad de atención, concentración y memoria, mejorando tu calidad de vida desde una óptica más integral y con una actitud mas crítica ante el mundo.
Para empezar aprender a meditar, es importante encontrar el momento que mejor te vaya del día, así te será más fácil convertirlo en rutina; un lugar tranquilo; ropa cómoda; una postura correcta donde las caderas estén relajadas y la columna vertebral estirada, sin sentirse forzado, ya sea sentado en el suelo, de rodillas o en una silla; una predisposición mental para mantenernos firmes en el propósito de gobernar, aunque sea unos minutos, nuestra energía mental, que habitualmente la tenemos dispersa y acaba gobernándonos a nosotros.
También recomendamos el uso de una libreta bitácora, donde apuntar todo el ámbito de la experiencia que tengamos durante el desarrollo de la práctica. Las más habituales son: incomodidades físicas, divagaciones mentales, sentimientos, corrientes emocionales, sensaciones de paz, de centramiento, comprensiones.
Fijar la atención en un objeto, el esquema corporal, o la respiración son los soportes más habituales que utilizamos a la hora de iniciar una práctica meditativa. Existen muchos otros soportes atencionales como sentir sensación en la palma de las manos, dedos o yemas, los collares, cuentas, rosarios, mantras, oraciones, visualizaciones de formas, colores, energia psicofísica, mirar la llama de una vela,....
El foco atencional, vendría ser como un palo mayor donde agarramos nuestra atención, hasta entrar en niveles de concentración que nos lleven al estado de meditación.
Al iniciarse en estas prácticas es muy común que aparezcan incomodidades físicas por mantener la postura, o pensamientos, sentimientos o emociones no deseados, que de repente saltan y nos atrapan nuestra atención. Es normal, a todos nos sucede. En el momento el que notamos que estamos reaccionando a cualquier tipo de incomodidad, hemos de evitar seguir enjuiciando, y para ello volvemos nuestra atención a la respiración, o al punto que tenemos como soporte. La meditación nos ayuda a ir adoptando una actitud abierta ante todo lo que sucede, a observar sin enjuiciar, ni eliminar, ni modificar.. simplemente observar todo lo que va sucediendo sin apegarnos.
A MEDITACIÓN EN EL DÍA A DÍA
La meditación poco a poco te va enseñando a meditar
La vida cotidiana nos lleva a exteriorizarnos, es una fuerza centrifuga que nos saca de nuestro centro.
Practicar unos minutos al día la meditación nos ayuda a compensar esta tendencia, es una fuerza centrípeta, que nos va devolviendo a estados de centramiento, serenidad y calma. Trabajar la "atención" nos permite ser espectadores de los pensamientos y corrientes emocionales en las que habitualmente quedamos atrapados: odios, celos, rabias, soledad, miedos.... y que sin darnos cuentan tanto tiempo nos gobiernan. Esta actitud de espectador pasivo, esta "conciencia testigo"! de todo lo que va sucediendo mientras nos silenciamos, poco a poco nos va ayudando a "desapegarnos" de tantos y tantos contenidos mentales que nos toman y nos gobiernan de manera tan irracional; y nos va devolviendo a nuestro propio centro, desde donde volvemos a tomar el mando de nosotros mismos sin tanta dualidad. Trabajar esta "conciencia de sí" en la vida cotidiana es una herramienta muy útil, porque nos permite ir dando coherencia a temas muy importantes para nuestro propia autorealización como personas, nos permite que lo que pensamos, lo que decimos, y lo que hacemos se vaya encaminando en una misma dirección.A medida que conseguimos minimizar la contradicción, la energía que nos mueve se polariza hacia una mayor autoestima, a una mayor empatía, a una mayor conciencia de nosotros y del mundo